Dynamo, mi medicina, jarabe malo pero a la larga bueno

Yo odiaba Dynamo.

Cuando murió Cerati yo no era fan que digamos. Él siempre estuvo ahí, en la radio, en la carpeta de canciones random que tenía en mi compu, en mi colegio donde mi profe de Lenguaje no paraba de citar algunos de sus versos como un mantra y el profe de Música nos hacía tocar algunos de sus temas como entrenamiento. El día que murió estaba en clase de Inglés, bajé de la tarima donde estaba exponiendo con mal dominio del idioma (tampoco es que en español me salve) y entonces el amplificador sonó con la voz de uno de los profesores anunciando la muerte de este músico. La verdad quedamos en shock. Para mí era de esas personas que siempre van a estar ahí vivas, como Felipe Camiroaga. Incluso tenía esperanza que despertase algún día del coma, así como encontrarían a Felipito vivo como el náufrago de Tom Hanks. En fin... no pensaba que Cerati se iría así como así luego de 4 años dormido, que ya no estuviese más en el mundo se sentía raro.

Algunos de mis conocidos se creen que me gusta Soda y Cerati por mi pololo argento. La verdad yo me metí más a fondo primero, aunque los dos ya conocíamos la banda, quién no. Cuando decidí ponerme de lleno a escuchar Soda descargué un tiraje de lo mejor de Soda Stereo por aTube Catcher y estuve una hora y tanto escuchando los mayores éxitos de la banda en mis viajes de ida y vuelta en micro, yendo y viniendo del colegio. De ahí no paré más.

Creo que lo que más me pegó a Cerati en específico (después de todo él era el compositor principal, sin desmerecer a Zeta ni Charly) fue esa relación que tuvo con Chile, cuando andaba con Cecilia Amenábar. En parte porque la historia entre los dos se parece un poco a lo que tengo yo el pololo, entonces cuando escucho al Cerati de esa época es como cuando un amigo te habla y entiende lo que estás pasando, creo que fue su época más honesta, entre 1992 (Colores Santos con Melero) y 2003. Lástima que se separaron (cómo la dejaste ir, mierda???), incluso siento que luego de Siempre es Hoy sus temas pierden sustancia, aunque no quiere decir que no me guste Ahí Vamos, al menos musicalmente sí me gusta. Eso sí, Fuerza Natural aunque no me guste mucho y está por debajo del barril de mis discos favoritos suyos, es un trabajo donde vuelve a algo que de verdad siento que estaba satisfecho y habiéndose reconciliado consigo mismo. Qué habría hecho luego de ese álbum si no hubiese sucedido lo del ACV? Nunca lo sabremos.

La preciosa Cexy Ámbar, tocando el bajo con su célebre ex en Chile durante los 90, cuando todo era miel sobre hojuelas y mi profe de Lenguaje de la media le dedicaba sus pajas (exagero pero en una clase él nos confesaba que se le caía la baba por ella).

Cuando me puse a escuchar la discografía entera y estuve trabajando de diseñadora gráfica en negro llegué a Dynamo. Me puse los auriculares porque no me gusta joder a los demás con algo que por ahí no les guste y me di una vuelta por ese disco. Pensé que qué bueno que solo lo puse para oírlo yo, me pareció una cagada (?). La atmósfera sacada de un coro de aspiradoras la encontré insufrible y enfermiza. Todo sonaba como una tormenta eléctrica que encrispaba los pelos y hacía chirriar los dientes. De ahí no toqué más el álbum y la primera vez que fui a Buenos Aires y pasaba por una disquería junto a mi pololo, encontraba el disco en los escaparates y para mí era obligado hablar pestes de él. Ponía una sonrisa burlona y le hacía morisquetas.

Pero cuando compartí en persona por primera vez con mi amigo Gus Dell encontré otra opinión opuesta. A él le fascina Dynamo. No es raro conociéndolo, pues es fan de Babasónicos y los inicios de esta banda fue siguiendo esa onda shoegaze que tiene el disco de Soda. Me dijo que era normal que no me gustase, todos piensan lo mismo la primera vez. Yo no me lo creí y así pasaron meses saltándome el disquito repelente ese, teniéndolo eso sí metido en mi MP4 para decir nomás que tengo toda la discografía de Soda en mi reproductor.

Un día de noche, aburrida o triste (o bien las dos cosas) agarré el MP4 y puse Dynamo a ver qué onda. No sé qué pasó, pero quedé fascinada. Ya de partida para mí Secuencia Inicial, el tema que abre el álbum es similar a Back to the USSR de The Beatles, del disco homónimo que por mucho tiempo fue de mis favoritos. Es como un avión sobrevolando la ciudad, entonces un coro de guitarras cristalinas suenan en medio de la calle, arriba del avión y la atmósfera se vuelve como el interior de una pecera, Cerati ya no canta, casi habla de todas las canciones o grita como en Ameba, pero la idea ya no es hacer música, sino ruido. Por eso a la primera escuchar Dynamo es tan desagradable, nunca te quedas quieto y a pesar de los ritmos repetitivos dónde pueda llegar una canción es impredecible, como en el caso de Nuestra Fe.

Quizá no hay hits rimbombantes como en Canción Animal, ese disco del cual prácticamente todos los temas terminaron como singles (excepto el más simplón, 1990), pero todas las canciones, cuando les agarras cariño son de una sostificación increíble, y por sobre todo, disfrutables. Mi favorito y con el cual me rompí los tímpanos de tanto repetirlo a todo chancho con auriculares es Toma la Ruta. Es obvio que Cerati la escribió pensando en Ceci. Me lo imagino en la atmósfera del tema cargado de guitarras con todos los efectos pedaleros posibles mandando todo a la mierda, agarrando una moto y yéndose a Chile, dejando atrás la fama. También lo interpreto como una declaración de intenciones: atrás queda el viejo Soda, entre el ruido nace otro, más experimental, osado y violento, a pesar de que las letras que son muy optimistas y esperanzadoras, seguramente habiendo encontrado los tres miembros una cierta estabilidad en sus vidas (a pesar de las rencillas entre la banda, la verdad en lo personal propio habían encontrado algo de paz, cosa que a mi parecer se fue al carajo cuando a Zeta se le murió el hijo Tobías en un terrible accidente y él, como el balance, el tensengrid de la banda, ya no tenía fuerzas de seguir siendo mediador entre los resentimientos de Charly y Gus).

La portada de Canción Animal. Se preguntarán algunos la simbología de los elementos: Cerati es la pasión, representado en los leones copulando; Alberti es la juventud, al ser el menor de los tres su símbolo es la veleta que se la lleva el viento, por otro lado el tensegrid de madera es Bosio en el papel del equilibrio.

Charly Alberti, el veleta.

Zeta Bosio, el equilibrio

Gustavo Cerati, la pasión. La mina con él es Paola Antonucci, su novia y la musa predominante del disco Canción Animal. Juntos recortaron de un libro de Biología los leones y al parecer diseñaron la portada, si es que no lo hizo solo ella.

Ya que hablamos de Canción Animal creo que viene al caso mencionar a alguien que fue parte de esta historia y que en cierto modo algunos le achacan el final de la banda. Varios culpan a Paola Antonucci, una vestuarista de las giras de Soda. Bien se sabe que ella anduvo con Alberti primero y luego pasó a ser la novia de Gustavo (no sé si tenía una fijación de meterse con las minas de su compañero, luego andaría con Deborah de Corral, ex de Charly. Igual ya habían pasado años de eso último pero igual armó su polémica con eso de los códigos). Otros a Cecilia, que estando con ella a Cerati le dio con irse a Chile dejando toda la empresa en aguas inciertas y de paso dejándola embarazada. A varios les gusta culpar a una mina, la mítica Yoko Ono y el dicho que las minas matan todo. La verdad por mi parte yo apunto a...

Quédate con quien te mire como Melero mira a Cerati.

DANIEL MELERO. Hay un tema de la época pre Dynamo que hicieron juntos cuando se embarcaron en esa aventura llamada Colores Santos. Se llama Hoy Ya No Soy Yo, y me matan los comentarios de YouTube del videoclip. Varios diciendo que Gus y Danielito parecen putos, jugando disfrazados y con trajes de plumas. Les paso una ventanita al video para el que quiera chusmear. Todos los artistas, por no decir todo el mundo tenemos nuestro verano gay, o etapa gay, como sea. Esto es lo más parecido que vamos a ver de Cerati creo. No es que insinue que ambos tuvieron algo físico o siquiera romántico, pero sí había una química entre los dos, eso es innegable. Daniel Melero fue tecladista y en cierto modo arreglista (me arriesgo a decir) de Soda Stereo desde Canción Animal y se ve que le gustaba meter cuchara en el aspecto creativo de la banda. Llegaron a decirle a Gus que Melero le había echado a perder el disco. Hablamos de Canción Animal. CANCIÓN ANIMAL. Jajaja, y hasta hoy resulta ser el disco mejor valorado no solo por los fans, sino por medio mundo. Igual se nota que donde pisó más fuerte fue en Dynamo, donde su nombre aparece bastante en composición. De doce canciones, Melero aparece como coautor de cinco, lo que es harto, si nos ponemos a ver que Alberti solo sale en dos. A pesar de haber cooperado en el primer disco de Soda con un tema suyo Trátame Suavemente, eso era lo más pop que haría Melero en su vida. Para entonces era conocido como la oveja negra del nicho musical de Argentina, haciendo brujerías en una especie de pre tecno con sus sintetizadores en plenas tocatas rock metal. Se sabía que en uno de los debut de sus bandas los punketas y metaleros se le vinieron encima y lo bañaron en tomates, frutas y más verduras podridas. Y aún así se dio el lujo de trabajar y contagiar su gusto por experimentar con Cerati, el que al parecer más lo defendía cuando entró en calidad de coautor de varias canciones desde Canción Animal en adelante.

No quiero ofender a la comunidad LGBT ni nada, pero en esa época la estética de Cerati estaba muy a la par de lo gay y lo kitsch. Luego de Colores Santos Gus y Melero creo que jamás volvieron a trabajar juntos, al menos en lo nominal. En Soda siguieron, con Melero metiendo nuevas sonoridades a la banda. En verdad fue una mala influencia, si nos quedamos que metió tensiones en lo creativo, pero plantó semillas en Gus para volverlo un loco total de la electrónica. Para mí la obra cúlmine de Gus es Bocanada, la joya de mi colección de discos. Por ahí no hicieron nada más juntos porque Cerati se fue a hacer familia en Chile, pero la verdad lo que hizo en mi tierra no era muy alejado de lo que seguía haciendo y hace hasta hoy Daniel Melero con la música, si a eso se le puede llamar así. No menosprecio ni nada, aunque Melero es un talibán total dentro de la electrónica y se atreve a romper lo más sagrado sampleando, él tampoco considera lo suyo música como tal.

No sé qué más decir... la verdad es que Soda me fascina. Creo que es una de mis bandas favoritas, junto con otras como los Beatles. La verdad la música que escucho tiene un tremendo valor sentimental para mí, además del artístico. Me gusta escuchar discos, aunque estos tiempos son la era del single y los músicos se preocupan más de hacer un video promocional (que no está mal), creo que para mí el cariño radica en el mismo que siente la gente que sigue prefiriendo al papel al pdf cuando se trata de libros. Creo que todos tenemos una banda sonora de nuestras vidas, y si no fuese compositora creo que Soda y las demás bandas de mi repertorio serían parte de ese soundtrack.

Me da pena como Dynamo ha sido el más infravalorado de todos los álbumes de Soda Stereo, cuando es el que más esquemas rompe. Me he dado cuenta que amarlo es un proceso y un viaje, desde que lo escuchar por primera vez hasta que te va tragando toda esa sonoridad avasalladora. Igual me da vergüenza haberle echado mierda en un principio y al mismo tiempo me da vergüenza decir que me gusta. Y me doy vergüenza también por esa contradicción y cobardía, pero bueno, en este blog que nadie lee porque no quiero lo grito a los cuatro vientos (a pesar que no me oigan).

Me voy por las ramas. Los dejo con un link directo a mi tema favorito de Dynamo: Toma la Ruta. El "solo" de guitarra desgarrada en medio de la canción es lo que más disfrutaba de todo. Además del verso "Probaste luna y bebiste cielo", que es precioso.

LETRA

No preguntes mas por mi 

Nadie sabe nada nada 

No estés preocupada 

Yo la paso bien 

Ah después de tanto andar 

Tanto andar 

Estas en el mismo lugar 

Mismo lugar 

Probaste luna 

Y bebiste cielo 

Y a veces sueñas con volver 

A los viejos buenos tiempos 

Ah después de tanto andar 

Tanto andar 

Estas en el mismo lugar 

Mismo, mismo lugar 

Sal del camino 

Toma la ruta 

Sera diferente, diferente, diferente 

Ah y si después de andar 

Tanto andar 

Estas en el mismo lugar 

Mismo lugar 

Después de tanto andar 

Tanto andar 

Estas en el mismo lugar 

Mismo lugar 

Toma la ruta 

Sal del camino y toma la ruta

Gracias totales a Gustav Dracko, el autor del blog El Códice Cerati, del cual me basé un poco para poner algunos datos, además de entretenerme varias tardes con información que no sabía y me interesaba saber. El link de su blog y entrada que me sirvió http://infernomax.blogspot.com/2016/06/